Las manos lascivas
manosean las capas de amor
que hay antes del magma
que es el corazón.
La atracción siempre es pistoletazo de salida.
¿Existe de veras el amor a primera vista?
Existe erección, ebullición o tembleque
a primera vista, pero no amor.
Un te quiero es una promesa demasiado densa.
Un amor es demasiado extenso
como para otearse a primera vista.
Dos idiotas se encuentran varias veces
por vida y siempre pasa lo mismo.
Vibra el mundo. Aúllan los terremotos.
Las carnes recitan química en su interior.
Los protagonistas se miran
y se fundan pequeños episodios de una historia nueva.
Se agradan hechizándose. Sonríen sus esperanzas.
Transcurren ambos
el uno por dentro del otro
y finalmente algún día
se atreven a enamorarse.
Quintí Casals
No hay comentarios:
Publicar un comentario