Honorable ejército
Alrededor de todo el globo
miles de tropas se organizan
para sembrar el caos y el robo.
Pero ellos son el orden del sistema,
ellos son el orden que nos condena,
el orden que clasifica,
tú eres bueno y tú un canalla,
tú el primero y tú el último en la salida
que va a la muerte y pasa por la vida,
la objetividad por unos sujetos definida.
¿Qué quieres que te diga?
Si mi locura es un exceso de cordura
para ellos una existencia vacía,
para mí son las alas que aún perduran.
El camuflaje de vuestro traje
esconde el miedo al miedo que os den miedo.
Las balas de vuestros cañones cobardes
hieren y matan a otros por vosotros.
Las medallas a vuestro honor
son fruto del árbol de la pavura.
Los territorios que son ocupados
quedan vacíos de amor y ternura.
Vuestras risas al matar tipos inocentes
os hacen fuertes en el ama de un débil.
El dinero que financia a estos valientes
es el magnate que nos jode siendo estéril.
Los tanques que cercenan niños y niñas
es la caja tonta evolucionada y blindada
La evolución propiciada por las guerras
es el progreso bombardeado por el mañana.
Sus ojos, sus uñas, su calavera,
Sus pies, sus tímpanos, sus virus
Su piel, sus labios, su pechera,
Sus sentidos, sus manos, su espíritu
Son cada una de aquellas partes
procedentes de carne y sueños
que robaron todos esos héroes
en sus viajes guiados por su dueño,
el dinero,
el poder en cifras,
sin embargo,
las letras
se rebelaron.
No hay mayor defensa a tu patria
que no dañar a otros con su nombre.
No hay mayor ofensa al mundo y su ánima
que todo se mueva por quien es más hombre.
No hay mejor nación
que tu cabeza y tu corazón.
Aunque seamos humanos,
es mejor uno,
que un grupo y armados.
Quintí Casals
No hay comentarios:
Publicar un comentario