¿Cómo asir el azul de las nubes,
si la tierna esponja que los recubre
se eleva hasta la figura más futura y más lejana?
¿Cómo entender que la madera con el fuego se quema,
que con el agua se moja, que entre vapor no se ve?
¿Cómo dejar crecer la uña, el dedo, el problema,
cómo actuar delante del huracán o el hecho?
¿Cómo no parar al nutriente que emigra hacia la piel,
cómo no apalear al perro manso que todos llevamos dentro?
¿Cómo amilanar la sangre mareada en música,
cómo no romper el hueso, la palabra o la vanidad?
Pies enlutados,
el silencio ante el triste OK del ahora.
Ser un ser es sufrir suficiente sufijo.
Ser no es ser antes de ser para ser.
Me he visto derramar en los demás.
He ennegrecido debajo de mi sombra.
Los sueños ahogados bajo los nenúfares duermen.
Un pubescente grita borracho abajo de casa
y creo recordar que un día escribí sobre él
bajo mi piel.
Quintí Casals
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