Yo no le temía a nada, y ahora le temo
Yung Beef
Que todas las heces del mundo caigan en tu cara
y sepas entonces cuán valuosa es cada pestaña del cielo.
Las nubes y sus cosas. El aire y su frenesí.
Soy incapaz de sentirme sólido en tierra.
Vibra cada vértebra del recuerdo que un día tuve.
Me calo en cada conexión con la eterna encrucijada.
Verte será siempre mi condena más dulce,
mi más insoluble satisfacción.
Odio todo el amor que sentí por ti.
Quisiera vivir en Disney.
Quintí Casals
miércoles, 30 de septiembre de 2015
lunes, 21 de septiembre de 2015
lunes, 14 de septiembre de 2015
Reclamo
No sé qué soy, de dónde vengo, a quién pertenezco.
Veo las formas del mundo escogerse en blanco o negro.
En el centro de la ausencia planean ciertas mariposas.
Vuelan y sonríen ante el baile de los cuerpos.
Quintí Casals.
Veo las formas del mundo escogerse en blanco o negro.
En el centro de la ausencia planean ciertas mariposas.
Vuelan y sonríen ante el baile de los cuerpos.
Quintí Casals.
Bajo mi piel
¿Cómo asir el azul de las nubes,
si la tierna esponja que los recubre
se eleva hasta la figura más futura y más lejana?
¿Cómo entender que la madera con el fuego se quema,
que con el agua se moja, que entre vapor no se ve?
¿Cómo dejar crecer la uña, el dedo, el problema,
cómo actuar delante del huracán o el hecho?
¿Cómo no parar al nutriente que emigra hacia la piel,
cómo no apalear al perro manso que todos llevamos dentro?
¿Cómo amilanar la sangre mareada en música,
cómo no romper el hueso, la palabra o la vanidad?
Pies enlutados,
el silencio ante el triste OK del ahora.
Ser un ser es sufrir suficiente sufijo.
Ser no es ser antes de ser para ser.
Me he visto derramar en los demás.
He ennegrecido debajo de mi sombra.
Los sueños ahogados bajo los nenúfares duermen.
Un pubescente grita borracho abajo de casa
y creo recordar que un día escribí sobre él
bajo mi piel.
Quintí Casals
si la tierna esponja que los recubre
se eleva hasta la figura más futura y más lejana?
¿Cómo entender que la madera con el fuego se quema,
que con el agua se moja, que entre vapor no se ve?
¿Cómo dejar crecer la uña, el dedo, el problema,
cómo actuar delante del huracán o el hecho?
¿Cómo no parar al nutriente que emigra hacia la piel,
cómo no apalear al perro manso que todos llevamos dentro?
¿Cómo amilanar la sangre mareada en música,
cómo no romper el hueso, la palabra o la vanidad?
Pies enlutados,
el silencio ante el triste OK del ahora.
Ser un ser es sufrir suficiente sufijo.
Ser no es ser antes de ser para ser.
Me he visto derramar en los demás.
He ennegrecido debajo de mi sombra.
Los sueños ahogados bajo los nenúfares duermen.
Un pubescente grita borracho abajo de casa
y creo recordar que un día escribí sobre él
bajo mi piel.
Quintí Casals
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